FUB (Fui un Banner), es un proyecto ecológico presidido por el ingeniero José Antonio Díaz Knutzen, que reutiliza los banners publicitarios para fabricar mochilas, cartucheras, morrales, portalaptops sostenibles y así las personas puedan darle un mejor uso.
Las personas que transforman este residuo publicitario y le dan una segunda vida son las mujeres del penal Santa Mónica de Chorrillos, quienes ven una oportunidad de emprendimiento y superación en esta gran iniciativa.
La iniciativa nació debido al gran problema que los residuos, que en su mayoría son quemados en botaderos informales, generan microplástico y por ende contamina a nuestro ecosistema marino. “Solo en Lima, fuera de campañas políticas, se producen alrededor de 5 ½ estadios nacionales por mes de banners. Es decir, 39 mil metros cuadrados.”, mencionó Díaz en una entrevista al portal web Vía Expresa.
“No solamente le damos una segunda vida al banner, sino que también brindamos una segunda oportunidad a mujeres privadas de libertad. De esta manera rompemos el círculo vicioso al que muchas veces se enfrentan una vez en libertad y creamos una espiral virtuosa”, agregó el ingeniero.
¿Cómo se fabrica? Solo un banner de 2×1 metros, en tamaño promedio, es capaz de confeccionar alrededor de cuatro eco-bolsos. Además el proyecto ya cuenta con aliados estratégicos tales como Kunan, la plataforma de emprendimientos social y ambiental más grande del Perú y el Instituto Nacional Penitenciario del Perú (INPE).
La meta de este gran proyecto es que apuntan a formar la primera promoción de mujeres costureras de banners en el Perú para el 2021.
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