Las ventas de parlantes Echo basados en el software de reconocimiento de voz de Alexa fueron 9 veces superiores a las de la temporada navideña de 2015, dijo Amazon en una declaración. A la compañía le costó mantener las existencias a pesar de la “mayor producción”, dijo Jeff Wilke, Máximo Responsable de Consumo Global.
Medir la demanda de un producto es difícil. Las firmas minoristas corren el riesgo de perder dinero por un exceso de inventario o de perder ventas y decepcionar a los compradores al no tener existencias suficientes. De hecho, Amazon agotó las existencias de sus parlantes Echo a mediados de diciembre.
La escasez de Echo demuestra que los asistentes activados por voz interesan a los consumidores, que pueden utilizar los comandos de voz del aparato para pedir pizza, controlar tareas escolares y reproducir música, entre otras tareas.
“Echo y Echo Dot fueron los productos de mayor venta en Amazon este año, y nos entusiasma que, en consecuencia, millones de nuevos clientes vayan a acceder a Alexa”, dijo Wilke.
Más de 70% de los usuarios de Amazon compró por medio de un aparato móvil en la temporada navideña, dijo la compañía.