La idea de «tribu» de usuarios de una marca, está siendo cada vez más usada y entendida. Estas «tribus» no solo hablan de los productos que tienen y las cosas que ellos usan de la compañía, como beneficios y las aplicaciones que se pueden obtener, sino que empatizan rápidamente entre ellos.
Y es que todas las marcas pueden potenciar y pueden servir para conectar con los consumidores al nivel de crear sus propias tribus. Debido a que muchas marcas se definen como un estilo de vida para unir a unos con otros.
¿Cómo construir tu propia tribu?
Como apuntan muchos expertos, para hacerlo hay que trabajar ciertas áreas y sobre todo no pensar en lo inmediato. Estas tribus no se construyen de un día a otro. Primero hay que encontrar a tu gente. Luego, hay que comprender que esto exigirá un nivel mucho mayor de trabajo y sobre todo un trabajo diferente.
Se debe diferenciar que una cosa es una base de clientes y otra muy diferente es hacer de esa base una comunidad. No se puede ser genérico, se debe ser claros con su identidad y llegar a lo que al público le interesa.
Por último, la marca tiene que entender que esa comunidad no será exactamente sobre ella, sino más bien sobre el grupo y cómo se relacionan entorno a ella y asociarse a ciertas ideas pueden ayudar a posicionar a la marca.
