El storytelling existe desde el principio de la historia, a pesar de ello sigue y seguirá siendo una de las mejores formas de transmitir un mensaje capturando la atención de la audiencia. Hablando de publicidad es la mejor forma de “envolver” un mensaje para hacerlo digno de obtener algo de atención.Pero debemos saber que muchas veces no basta con tener una historia que contar, lo realmente importante es encontrar un equilibrio entre despertar emociones y transmitir correctamente el verdadero mensaje de la historia.
“El ser humano se mueve por emociones y sensaciones, por ello, las marcas ven en el storytelling un medio para buscar empatía con sus clientes a través de historias que impacten, y es que la gente puede llegar a olvidar lo que dijiste, lo que hiciste, pero nunca olvidará cómo la hiciste sentir”, comentó Ricardo Ortiz, vicepresidente ejecutivo de GRUPO MAYO.
Crear historias en torno a una marca, la orienta a empatizar con su audiencia y generar vínculos con ella. De esa forma, llego con el mensaje, ya sea de manera táctica o como parte de una estrategia de construcción de marca a mediano-largo plazo.
Es por eso que para contar historias que impacten y sobre todo alinearlas a temas de interés, debemos de tomar en cuenta algunos consejos a fin de implementar estrategias de comunicación efectivas:
- Despierta emociones: No importa si el sentimiento que aflora sea de tristeza o de alegría, pero debe emocionar y sensibilizar al público. Despertar algún sentimiento significa que las personas se han sentido identificadas, ya que muchas hacen recordar algo de su vida y lo trasladan al terreno personal.
Un claro ejemplo de este tipo de campañas es “Intercambiados”, la cual se enfoca en la individualidad de cada peruano, asumiéndolo como parte de nuestra historia y con algo único que contar. Este mensaje es una invitación a celebrar nuestra diversidad y asumir el reto de ser alguien diferente, de vivir nuevas experiencias y a mirar con ojos renovados lo que nuestro país tiene para ofrecer: “Porque entendiendo más los talentos de otro peruano, aprenderemos a querernos más como país”.
- Motivación al máximo: Sin motivación no hay emoción. Si al contar una historia no hay entusiasmo, muchas de ellas pueden convertirse en un fracaso. Para lograrlo, es recomendable considerar los siguientes cuestionamientos previos: ¿qué le motiva a mi público objetivo?, ¿qué les seduce? o ¿qué tenemos en común? Una vez resueltas estas dudas nos habremos puesto en el lugar de quien recibirá la comunicación, el siguiente paso será idear una estrategia que toque su fibra más íntima para conectar con la marca y activar el call to action.
Así lo entendió Metro, a través de su campaña “Mujer peruana. Mujer insuperable”, donde muestra a las peruanas como diversas, multifacéticas, plenas, luchadoras, y siempre con actitud positiva. Orgullosas de sus historias personales, superando metas porque ellas son insuperables.
- Momentos de incertidumbre: Para captar el interés, debemos cautivar y enganchar desde el principio. Toda historia debe tener momentos de incertidumbre, esos mismos que dan sentido a la vida de las personas. El consumidor tiene que ser testigo de una historia que la haga suya, en donde a través de un entorno ordinario encuentre esa resistencia de algo que lo impulsa, reciba ayuda, supere pruebas y obstáculos, toque fondo, se convierta en el héroe y devele una transformación final.
- Mensaje fuerte y claro: La razón de ser de la marca debe quedar clara desde un inicio para contar una historia que enamore al público, solo así se logrará que este se identifique con la verdadera motivación y, en consecuencia, con la marca por su carácter recurrente dentro de una historia.
Siendo el bullying un tema recurrente en nuestra sociedad, Nosotras, la marca de cuidado íntimo femenino, llevó a cabo por primera vez en el Perú una acción que busca empoderar a la mujer a través de la seguridad y confianza en ella misma. A través de la campaña “Cambiemos el bullying por loving”, deja un mensaje contundente que invita a las adolescentes a hacer valer sus derechos de respeto e igualdad para construir un mejor entorno basado en el empoderamiento y respeto para ellas.
- Fácil de recordar y de contar: No son necesarios muchos elementos, pero sí, que contengan mucha fuerza emocional con el fin de que deje huella y esta pueda ser transmitida a otras personas para que así sientan la necesidad de conocer la marca más de cerca.
- Finalizar con la imagen o mención de la marca: Para que el usuario termine por relacionar esa historia que ha logrado emocionarle con ese producto o marca, la historia debe prometer algo, como toda marca con su producto, para captar usuarios que se conviertan en fieles consumidores.
Muchas veces el storytelling llega a marcar mucho a las personas, es por ello que las empresas deben saber comunicar y saber hasta dónde llegar, recordemos que dar un mensaje de promesa conlleva a expectativas y estas al éxito de la marca, si son cumplidas.